Carmel
la correspondencia de teresa LT 088 – A Marie Guérin – 24 de abril de 1889

DE  
MARTIN Thérèse, Sor Teresa del Niño Jesús
À 
GUERIN Marie, Sor María de la Eucaristía

24/04/1889

24 de abril de 1889 JMJT

Jesús Miércoles Abril 89.
Mi querida hermanita,

Vengo a pedirte un favor, y es a ti a quien me dirijo, porque sé que Les Buissonnets que ahora, ¡ay! Son desiertos que alguna vez fueron tu dominio.
¿Recuerdas un libro que me regaló la señora Tifenne en el momento de mi 1ra Comunión?... Se titulaba: “El ramo de la jovencita”. Este libro debe estar en uno de los cajones de la cómoda del pobre Padrecito, me alegraría mucho poder tenerlo cuanto antes junto con otro más pequeño que me habían regalado aquellas señoras de Primois. Es un libro marrón rodeado de una viñeta dorada, creo que son meditaciones sobre la Eucaristía. Este libro está en uno de los estantes del armario del dormitorio de Céline (el que está al lado de la puerta). ¡Querida hermanita, perdóname por pedirte este servicio!... Si fuera posible, ¡quizás podrías explicarle a la criada lo que quieres sin ir tú misma a Les Buissonnets!...
¡Es increíble cómo ahora me parece que nuestros lazos se han vuelto más estrechos, me parece que después de nuestro terrible calvario somos aún más Hermanas que antes!...
¡Si supierais cuánto os quiero!... cuánto os pienso a todos... ¡Ay! ¡cuánto bien hace cuando se sufre para tener corazones amigos cuyo eco responde a nuestro dolor!... ¡Cómo agradezco a Jesús que nos haya dado unos padres tan buenos... unas hermanitas tan bondadosas! Nuestras pobres hermanitas de allá no se cansaban el otro día de repetirnos todo el cariño que tenéis para con ellas. Vi que el corazón de mi pequeña Marie había tocado el corazón de mi Céline, y eso hizo muy feliz a mi pobre corazón, ¡porque amo tanto a mi Marie!, les resultaría difícil responder a lo que yo mismo pienso.
Me apresuro como una pequeña loca sin pensar que mi pobre pluma no sabe para nada responder a mi corazón, y que sin duda me confundiré al no poder ser leído.
Querida hermanita, besa para mí a todos los que tanto quiero, dales las gracias por habernos consentido la Semana Santa con el buen chocolate, y el buen Pescado... ¡Ah! No se me ocurre el pescado... mi tío tenía algo tan PATERNO ese día, ¡algo fuera de lo común!... Nunca olvidaré esa sala.
Tu hermanita que te ama.
Sor Teresa del Niño Jesús

Volver a la lista