Carmel
la correspondencia de teresa LT 063 – A Louis Martin – 30 de septiembre de 1888

DE  
MARTIN Thérèse, Sor Teresa del Niño Jesús
À 
martín luis

30/09/1888

30 septiembre 1888
JMJT Carmelo 30 de septiembre

Mi querido Rey,

Tu pequeña Reina está aplastada bajo el peso y la magnificencia de tus presentes, es claro que es un Rey quien se los ofrece a su Reina. Primero fue desde la punta de Alençon que lo vi venir. Realmente es bastante real. No sé cómo agradecerte por tan hermosos regalos; dónde está el tiempo en que vuestra pequeña Reina habría saltado de alegría por un trato de un centavo que su Rey le dio, ahora su corazón todavía estaría feliz, pero el del Rey necesita dar más; por eso le da a su Reina un encaje digno de: la Reina de Francia y Navarra.
Es verdad, mi querido Padrecito, que si vuestra Reina es indigna de tanta riqueza, no son demasiado hermosas para el divino Esposo a quien la habéis dado, por eso estaré feliz de lucirlas; si no, en verdad no me atrevería, porque no soy más que la Huérfana de Beresina, sólo el día que tome el hábito mereceré llevar mi título de Reina.
Aún tengo una dulce misión que cumplir, es agradecerte, en mi nombre de Reina, y en el del Diamante y la perla fina, por una avalancha de peras, cebollas, ciruelas, manzanas, que salieron de la ronda. , como una cornucopia. ¿De dónde salió todo esto? un anciano dijo que era un señor que vivía cerca del Jardin de l'Etoile. Sólo podías ser tú también, mi querido Padrecito, la disposición fue bien aceptada, le dimos una buena acogida sin que nos lo pidieran. Lo curioso es que ella tuvo menos problemas para entrar que tu Reina, que tuvo que ir a Roma para que le abrieran la puerta...
Las cebollas enormes alegraron mi corazón; me hicieron pensar en los de Egipto, no tendremos que arrepentirnos de ellos como los israelitas. Volví a pensar en las de Lyon que cuestan 0,50 y son tan grandes. Bueno, mi Rey, creo que tu Reina te va a aburrir con sus balbuceos, pero está tan contenta que no puede evitar decírtelo. Ella te agradece por todo y te besa con todo su corazón.

Teresa del Niño Jesús pcind.

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